6º Encuentro ¿Miopía o estricta exigencia del jurado?

Ramón Almela. Doctor en Artes Visuales

Nora. "El hijo del Santo" Etiquetas de tela incrustradas sobre madera. 100x120 cm. PREMIO
Una reacción de descontento generalizado se extendió entre los 61 desestimados en la selección del 6º Encuentro Estatal de Arte Contemporáneo de Puebla que se presenta en la Galería de Arte Contemporáneo y Diseño (12 Norte 607, Barrio El Alto). Siempre es parte de la dinámica de un concurso la aceptación a regañadientes, protestar y tener que plegarse a la elección de un jurado que utiliza el propio criterio de lo que es digno de exhibirse. Esta vez, muchos artistas que dedujeron lo que podría resultar elegido en la convocatoria, siguiendo la selección del Encuentro del año pasado, cayeron en el error, al menos, en opinión de los miembros del jurado, de concebir como arte contemporáneo válido toda aquella expresión espontánea producida utilizando cualquiera de los medios disponibles, más si cabe, con los nuevos medios electrónicos. El descuido formal, la improvisación sin esmero mezclando disciplinas, el uso de temas ya sobrepasados, la concentración en vivencias introvertidas, son componentes atrasados de una visión contemporánea del arte.
Este jurado, compuesto por Germán Venegas, José Manuel Springer y Tatiana Pimentel quiso dejar claro ante el espectador poblano ciertos parámetros actuales sobre los que el concepto de calidad formal y la idea conceptual contemporánea consisten -en los que, además, estuvieron de acuerdo después de contemplar la obra presentada-. La exhibición de esta muestra seleccionada transmite una impresión centrada sobre la imagen y su significación contemporánea; La imbricación social del arte como motor de reflexión y actuación en el ámbito plástico y la ejecución sólida y acertada de los medios elegidos. Y en este sentido, muchas de las obras seleccionadas acentúan también la reconsideración de las posibilidades del medio, tanto de la fotografía como de la pintura, como por ejemplo.
Angelitro. "Asesino dormido" 45 dibujos, tinta china, acrílico y lápiz de cera sobre papel sulfatado. 50.5x33 cm. 2006. PREMIO
Desde luego, de las experiencias frustrantes para el artista rechazado fue la observada en la disciplina del video, pues el jurado desechó la casi totalidad de los 20 videos presentados, exceptuando a tres; de Yara Almoina -escribiendo y tachando 60 números- estrategia similar al video de Máximo González "lápiz-goma", y dos animaciones del colectivo Producciones 333. El resto no fue seleccionado por la carencia de calidad y entendimiento del medio, y algo así sucedió con las 48 obras tridimensionales de las que tan sólo 11 piezas alcanzaron la satisfacción de los miembros del jurado, que con las 36 obras bidimensionales compusieron un conjunto de interés con el que se entregaron cuatro premios, señalando el jurado en el acta que todas las obras expuestas debían considerarse como menciones, lo cual es un punto de alabanza a la producción artística de Puebla, siendo que un grupo de estrictos jueces críticos acostumbrados a un nivel internacional exigente de creación encuentran esta calidad en el arte contemporáneo de Puebla.
Oscar Hernain Bravo. "Puente" Impresión digital. 140x188 cm. 2006. PREMIO
Esta mecánica de un concurso de arte contemporáneo iniciada por el actual subsecretario de Cultura, Gerardo Ramos Brito, y mantenida desde hace seis años, a contracorriente presupuestal muchas de las veces, va rindiendo su fruto. Nuevos nombres aparecen en el panorama artístico, facilitando al público y organismos de cultura y galerías su conocimiento. Al mismo tiempo, la sinergia establecida de exigencia genera superación y estímulo de conocimiento y replanteamiento artístico. Quizás, la desconfianza de los artistas más establecidos que evitan ser juzgados por un criterio lejano a sus coordenadas productivas provoca una escasez de participación por gran parte de la comunidad artística, que de ningún modo puede reducirse a los 97 artistas presentados con sus 217 obras. Y, ¡Por supuesto! una exposición no se agota hablando de lo que no se muestra. 30 artistas aparecen seleccionados en un conjunto que apunta a la diversidad del arte contemporáneo abarcando amplitud de posturas.
Omar Árcega. "s/t" Libros (La Constitución Mexicana) y transfer sobre tela. 25x60 cm. 2006. PREMIO
Inquietante resulta la obra de 45 dibujos pictóricos de Angelitro, en quien el jurado depositó su unanimidad por el merecimiento de premio. "Asesino dormido", insinuando en varias formas la existencia del odio y la tendencia homicida bajo otra apariencia. El índice de asesinatos y de muertes en la sociedad mexicana ya sobrepasa los niveles de conmoción en la población. Con una técnica combinada de tinta china, acrílico y cera desplegando violentos trazos elabora rostros dispares y amenazantes.
Kena Enriquez. "alterACCIONES" Impresión digital.
Con el uso de etiquetas incrustadas en la superficie de madera, la obra de Nora Adame, quien también recibió premio por sus dos obras, provee un redoblado discurso entre la abstracción del collage y la composición de la imagen de figuras populares. Nora surge, si no se estanca en la mera envoltura de la realización, como destacada figura en la plástica poblana.
Leticia Morales. "Danza sobre hielo"
Oscar Hernain que recientemente ha realizado intervenciones, performances y videos de gran interés y compromiso social llega a este Encuentro seleccionado solamente, y premiado, en la fotografía con impresión digital en lona, sátira irónica del espacio urbano de Puebla con el que varias veces ha trabajado y que también comparte Kena Enriquez con sus obras "interVEnciones" y "alterACCIONES". La actitud artística de Oscar Hernain pone de relieve, al referirse a la muestra, lo que él denominó “selección miope” al ser rechazados los que percibían el arte de otra manera, comprometidos con lo contemporáneo, inducidos por lo seleccionado en el anterior Encuentro. Su opinión, conociendo varias de las obras que no fueron admitidas por el jurado, es que "muchos artistas se atrevieron a ejecutar piezas a partir de observar su entorno social"... "pude observar varias obras las cuales son muy válidas" y no coincide con la línea del jurado.

Quizás, en esta selección ha prevalecido la noción de calidad de ejecución en detrimento de propuestas que apuntan posibilidades, crítica y reflexión en diversos aspectos y medios del arte actual. Seguramente, muchas de estas propuestas han pasado desapercibidas por el criterio de un jurado más centrado en los valores predominantes en el arte institucional establecido, y conformado por parámetros de lenguajes desarrollados. El jurado no se detuvo a escudriñar la viabilidad de ciertas propuestas no plegadas a lo convencional. Actuó como actúa un galerista en el momento de juzgar una propuesta artística: Si ve algo que no le gusta de lo presentado por el artista... rechaza todo. Para los parámetros de juicio de este jurado, aquello que no es presentable en galería de arte, no era considerado adecuado para su selección en un concurso, pero se olvidan el carácter de "Encuentro" que posee esta muestra en Puebla. Así que, a buen seguro, se descartaron entre las obras desplazadas
Yuridia Ruiz. "Gula"
muchas que contienen interés potencial en aspectos exploratorios, a pesar del descuido formal que tuvieran, y quizás este descuido formal era su razón de ser, lo que se contrapone con las ideas de comercio de la obra. Queda pendiente por parte de la institución del Estado la definición esencial de esta muestra y el carácter de su selección más allá del criterio subjetivo de calidad.
May Zindel. "1,2" de la serie Ferrocarril
La pintura ha quedado mayormente limitada a la expresión abstracta marcada por una ejecución correcta matérico-expresionista de fuerte gestualidad entre las que destacan las piezas de Miriam Téllez-Jara y Leticia Morales, quien se apunta como una de las artistas con solidez evolutiva si sigue exigente consigo misma en el proceso de adecuación y planteamiento contemporáneo. La obra de Alberto Ibáñez, consolidado artista, es otra de las sorpresas al replantear su discurso pictórico en la dimensión matérica distanciado de sus realizaciones anteriores, en un silente reconocimiento a la crítica sobre la realización formal de su producción reciente. Esta vez, enraizado en la representación de vísceras de animal de Chaim Soutine de principios de siglo XX, convierte la superficie de la imagen en señalamiento social perturbador.

Y siguiendo con este deshecho corporal mundanal de la carne, gran parte de la obra bidimensional se centra en presentaciones significativas y sugerentes de la corporalidad como espacio de lo temporal, como las de Yuridia Ruiz cubriéndose de vegetales o joyas evocando los pecados capitales de la gula y la avaricia, la recurrente fragmentación de imágenes de Chipillatronik, la encerrada imagen en un vagón de ferrocarril del pasado de May Zindel, o el autorretrato de Eliécer Eduardo Alejo cubriéndose con sus propias manos, o las manchas de su propia sangre y fluidos corporales de Ángela Arziniaga. La fragmentación y lo desarticulado de la corporalidad llega al máximo con Renata Sánchez en la presentación, colgados de una percha, de los patrones de corte de un vestido.

La tridimensionalidad tiene su mejor representante en Marcelino Barsi con sus obras de bolsas de
Alberto Ibañez.
"Cabrito en canal (Don´t fuck with the classics)"
papel inflados "All that I wanted". La escultura se mueve en la perplejidad perceptiva de los textos sobre policarbonato de Cuatli con "Hipótesis" y los juegos de luz y reflejos en lámina metálica de Adriana Escudero.
Marcelino Barsi. "All that I Want" y "All that I Wanted"
Calidad en la ejecución de las obras medida en relación a la manipulación de los materiales conjugando el medio con las ideas contemporáneas de producción artística. Este Encuentro, dentro de una formalidad correcta carece de verdaderos "encuentros" sorpresivos que muevan la percepción y la reflexión del espectador, que debe ser la pauta a buscar en la selección de la obra a mostrar.
Renata Sánchez. "Diseño O.I." de la serie Colecciones
Publicado el 22 de Octubre de 2006