César Gordillo
Velia Gloria Vega Trujillo
Ana Laura Santillana
Elisa Olivares
Andreas Maximiliano Von Groll

Los discursos ético-morales buscan ocultar las verdaderas implicaciones de los problemas que atraviesa la sexualidad en Puebla. A pesar de que este es un hecho conocido, la apatía nos mantiene en general al margen de la problemática. Comparto con Ramón Almela, quien busca exponer y criticar este problema por medio de su obra, la certeza de que el arte es una forma de lograr que la gente tome partido.

En su tesis doctoral presentada en 1991 en la Universidad Complutense de Madrid, Almela desarrolla el concepto de la Pictotridimensión para identificar aquellas obras que se encuentran entre las dos dimensiones de la pintura y las tres de la escultura. Para "Acuse de Recibo", el artista amplia el concepto al de Pictrotridiarquitectónica, buscando así, en una sala que asemeja un pasillo al cual se ingresa por una puerta lateral, "envolver al público con el mensaje no reduciéndolo a piezas aisladas, sino provocando una interacción visual-conceptual con los elementos de la muestra" (R. Almela. "Acuse de Recibo", en critic@rte (www.criticarte.com). Coloca bajo este supuesto sus 11 obras y 38 pequeños recortes de cómics pornográficos de aproximadamente 10 x 10 centímetros intercaladas entre las tres obras colocadas en cada una de las paredes largas. En cada una de las paredes cortas se encuentra una obra, en medio del pasillo tres cubículos de tabla roca con los títulos de Eros, Sexo y Pornografía, que contienen seis estantes, cada uno con ocho frascos que muestran dibujos de escenas sexuales de forma explícita.

Para Almela la disposición de los cubículos, Sexo en medio de Eros y Pornografía, se relaciona con las obras dispuestas en las paredes que abordan, como lo indican sus títulos (así Sostenidos en la Doble Moral y Pederastia: Celibato y Ocultación), problemas ocasionados por la forma como se inscribe la sexualidad en la sociedad. Me cuestiono sin embargo cómo es que Almela, quien pretende que "el arte auténtico debe responder como detonador de significados, instigador de nuevos planteamientos y reconsideración de la realidad (...) actuando como resorte crítico de las estructuras de vida cotidiana", quiera lograr su propósito, cuando la tibieza de las obras por sí solas no parece instigar nuevos planteamientos y no me parecen por tanto fungir como crítica de la sociedad. No veo cómo una pintura de acrílico, enmarcada en dorado, mostrando un vitral de un padre con un acólito de manos atadas detrás de una maceta reconstruida, con su contraparte tridimensional de una maceta rota en el piso frente al cuadro, pueda llevarnos a tomar partido frente al ya conocido problema de la pederastia. Me parece que, desgraciadamente, los controvertidos temas de las obras independientes pudiesen presentar una verdadera confrontación si no se perdieran en una intrincada construcción conceptual-espacial que más que revelar parece ocultar de la misma forma que los discursos ético-morales.

Acuse de Recibo. Réplica crítica y recapitulación