III Bienal de Los Angeles; tres pasos adelante, dos pasos atrás

Ramón Almela. Doctor en Artes Visuales

Juan José Rivas. Premio de Pintura
La Bienal de Los Angeles se convocó un año más, con el tema "Saberes científicos, saberes cotidianos". Tal como pueden verse pasos de avance se aprecian también pasos de retroceso. Se ha avanzado en el sistema de convocatoria. Se creó una página web (http://cia.uiagc.pue.uia.mx/bienal3) que reúne información y las imágenes de las obras participantes. Esto añadió tarea a los proyectos pues los participantes debían inscribirse y cargar la imagen digitalizada en internet además de entregar la documentación en la Universidad Iberoamericana. También, esta edición de la Bienal será itinerante por varios estados de la República y se publicará un catálogo. Además, la selección y premiación no se realizó por fotografía como en ocasiones anteriores, se solicitaron las obras para que el jurado deliberara frente a ellas.
Miguel Angel Madrigal. Premio de Escultura
El proceso de la Bienal sufrió de la intermitente baja del servidor de internet de la U. Iberoamericana durante el mes de vacaciones de Agosto, a pesar de la anticipada notificación realizada por Aurora Berlanga, responsable de la organización, para que se mantuviera en activo. Esto provocó el desinterés por presentarse a la misma. Repetidos intentos de los posibles participantes por inscribirse a tiempo condujeron al abandono en muchos que no lograban siquiera conectar por teléfono con la Universidad hasta casi el mismo día en que finalizaba el plazo de entrega de solicitudes. La extensión por un mes del plazo de presentación no aumentó el número de propuestas que tan sólo alcanzó a ser 145 comparadas con las 250 que se presentaron en la II Bienal. Un mínimo filtro por requerimientos de tamaño y condiciones de entrega de la obra llevó a preseleccionar a 100 participantes para traer la obra a la selección final que aspiraba fuese de 70 obras.
Androna Linartas. Premio de Arte Textil
Una Bienal tendría que condensar el amplio panorama de la creación artística actual a modo de "flash" aunque siempre condicionada por el criterio de los curadores. Los organizadores debían atender con anticipación la elección apropiada de un curador además de impulsar una temática de reflexión. Como esto no es realmente una Bienal, sino un concurso... se forma un jurado calificador que estuvo compuesto por Gerardo Ramos Brito, José Lazcarro, pintores de Puebla y Alfredo Cruz, director del Museo de Arte Contemporáneo de Oaxaca, y el jurado honorario Araceli Zúñiga, investigadora visual de la UNAM. Como en todo concurso, la frustración y el descontento estaban garantizados. Y dado que la misión del jurado es precisamente esa –que resulta inapelable- no cabe protesta personal por enojo. Ese es el resultado de exponerse a ser juzgado y rechazada tu obra para ser mostrada. Lejos de consideraciones personalistas, lo que cabe es una reflexión sobre las actitudes y criterios elegidos para el rechazo de ciertas obras. Puede intuirse después de conocer sobre el talante de la selección una cierta estrechez de criterio que aún habrá que confirmar.

En un principio, habiendo presentado yo una obra a la convocatoria que no fue seleccionada, como otras setenta más, podía dejarme prender por el deseo de queja impetuosa, pero he preferido dejar pasar unas semanas para sedimentar esos sentimientos y juzgar con criterio reflexivo lo acontecido con los rechazados.
Ramón Almela. "Paradigmas de la Ciencia y el Hombre" Arte Objeto
La primera idea que me viene es el consejo a los que no pasaron "el listón" para que reflexionen con cruda, aunque difícil por afectada reflexión, si la obra no fue elegida por carecer de la exigible madurez, o si rebasó los límites del criterio del jurado. En mi caso, en múltiples concursos a los que en España me presenté (1981-1989) siempre fui seleccionado mientras realicé una obra convencional, deudora todavía de muchas influencias del proceso de aprendizaje. En el momento que mi trabajo se adentró en terrenos alejados de la tendencia artística imperante (Neoexpresionismo, Movida madrileña, Nueva figuración) y comenzó a moverse en la ambigüedad entre la pintura y la escultura fue constantemente rechazada. Recientemente, el intento de presentar una de mis obras a una subasta en el Centro Libanés de Puebla pasó por la frustrante sensación de ver mi obra colocada con las que ni siquiera reunían la mínima calidad pictórica para ofrecerse en la subasta. Ahora, de nuevo, el grupo del jurado de la III Bienal no supo apreciar mi propuesta. No importa. Mi obra es exhibida en Nueva York respaldada por Ivan Karp -OK Harris Gallery-, quien cincuenta años atrás descubría a Roy Lichestein y Andy Warhol que marcarían el advenimiento del arte Pop. Cuando la calidad de mi obra es sustentada por tal experiencia, la resolución de este jurado tan sólo deja al descubierto lo limitado de sus apreciaciones dominadas por sus propios gustos y no por un criterio amplio y contemporáneo actual.
Enrique Bermudez. Premio de Gráfica
La selección que se expondrá el 10 de Noviembre en la U. Iberoamericana es el intercambio artístico entre los miembros del jurado que promueve un espacio neutro ideológico de calidad artística convencional irreprochable y que no tendrá queja alguna, aunque el conjunto carecerá de riesgos. El sector conservador se negaría a considerar como obra de arte lenguajes de riesgo que el más atrevido y comprometido con valores nuevos intentaría sostener. Muchas obras de factura arriesgada han quedado fuera de la Bienal. Fueron seleccionadas obras de valor indudable juzgadas con parámetros ya establecidos por el arte en recientes décadas. Parece difícil que cuatro personas se pongan de acuerdo a impulsar una Bienal realmente actual sólo con criterios de arte anclados en lo seguro. No se promueve así la realidad del arte actual que busca un eclecticismo e idiosincrasia.
Angela Arziniaga. Premio de Fotografía
Y otra idea a mencionar que surge desde la convocatoria y selección realizada en la Bienal, y en la que me extenderé más en el próximo artículo, es la estrecha y confusa percepción de los géneros: Obras de pintura y escultura son juzgadas dentro de arte objeto. El género de arte objeto carece de identificación. Realizar una pintura con objetos no la extrae del género de la pintura, así como una escultura compuesta de objetos, sigue siendo una escultura. Debería establecerse las características esenciales bajo las que los diferente géneros se presentan, lo que Susanne Langer llamaba "Aparición primordial". Entonces quizás puedan siturarse las obras que se resisten a clasificarse como pintura o escultura entre un género de arte objeto o, lo que yo apunto, como "Pictotridimensión", obras formadas desde un espacio real bajo coordenadas pictóricas de textura y color.
Anabel Castro. Premio de Arte Objeto
Hace dos años escribía sobre la II Bienal "Neobarroco contemporáneo versus interpretación del barroco", que el jurado en lo sucesivo debía promover un ánimo de exploración inteligente y atrevido "que sembrará mayores expectativas de empuje en el panorama estancado de las artes plásticas en Puebla". ¿Ha contribuido este jurado en la III Bienal a tal objetivo?